Grupo Neat continúa innovando en sensores para epilepsia
Grupo Neat cuenta con la exclusividad de venta del sensor de cama y el sensor de muñeca en España.
Con el objetivo de cubrir la necesidad de detección de convulsiones epilépticas, independientemente de la edad, el peso corporal o el tipo de convulsión, Grupo Neat ha lanzado al mercado dos nuevos sensores de epilepsia, el sensor de cama y el sensor de muñeca. Se trata de dos dispositivos que detectan de forma inmediata la aparición de una convulsión con movimiento y envían una alerta por radiofrecuencia al cuidador.
El sensor de cama es un innovador dispositivo de pequeñas dimensiones, que a diferencia de otros sensores del mercado, ofrece un alto grado de sensibilidad, lo que permite detectar no sólo los movimientos repetidos provocados por una convulsión severa, sino que detecta también las suaves convulsiones que se presentan durante el sueño, en casos de epilepsias nocturnas.
Por su alta sensibilidad y confiabilidad, el sensor de cama está ampliamente recomendado para bebés, niños, jóvenes y adultos. Cualidad de gran trascendencia, al contar, tan sólo en España, con unos 400.000 casos de pacientes con algún tipo de epilepsia, de los cuales más del 50% de casos son niños. Además, la Organización Mundial de la Salud, OMS, reconoce que este padecimiento representa un importante problema de salud pública a nivel mundial.
Dado que el sensor de cama detecta las convulsiones mientras el paciente se encuentra recostado o dormido, Grupo Neat ha ido más allá y también ofrece el sensor de muñeca, el cual consiste en una pulsera que puede ser portada por el paciente las 24 horas de día, ya sea en una residencia o en un domicilio particular. Este dispositivo está recomendado para personas mayores de 10 años y detecta los movimientos inconscientes de los brazos, que se presentan durante un ataque tónico-clónico generalizado, mejor conocido como epilepsia de Gran Mal. Además, el sensor tiene la capacidad de realizar mediciones regulares de la actividad motora de la muñeca para comprobar si se trata de movimientos naturales o de una crisis convulsiva.
Tanto el sensor de cama como el de muñeca pueden ser configurados para que, cuando detecten la aparición de un ataque convulsivo envíen una alarma al sistema TREX, -un pequeño dispositivo en forma de móvil que debe portar el cuidador y que actúa como receptor de alarmas. Además el sistema TREX tiene una amplia cobertura, lo que le garantiza al cuidador libertad de movimiento.
Gracias al sistema TREX, estos sensores se han convertido en el dispositivo ideal para los cuidadores durante las guardias nocturnas, quienes pueden descansar con total tranquilidad y confianza, puesto que el equipo les alertará ante cualquier emergencia.
De igual forma, ambos sensores le permiten al usuario contar con un informe que incluye las convulsiones presentadas, fecha de inicio y fin de la misma y su nivel de sensibilidad.